Este viaje al centro de la Tierra no comenzará en Islandia, sino en el medio del Océano Atlántico, en un punto ubicado entre las Islas Cabo Verde y el Caribe. Hacia allí partió el lunes, desde Tenerife, el barco «RSS James Cook». A bordo viajan ocho científicos británicos cuya misión es explorar un misterioso y monumental agujero abierto en
el lecho marino.
El boquete en la corteza terrestre fue detectado hace cinco años, a unos 3.000 metros de profundidad, y deja al descubierto una de las capas internas del planeta conocida como «manto».
«Este descubrimiento es como una herida abierta en la superficie de la Tierra», explicó el doctor Bramley Murton, uno de los encargados de la expedición.
Si bien no se trata del único agujero de este tipo hallado en la corteza terrestre, su gran tamaño y fácil acceso en esa zona del Atlántico (donde no se sabe si nunca hubo corteza o ésta desapareció por fallas geológicas masivas) permitirá recolectar muestras y analizar la estructura y la función que tiene esta «segunda piel» del globo.
Los ocho exploradores -provenientes de las universidades de Durham y de Cardiff y del Centro Oceanográfico Nacional del Reino Unido- se proponen llegar cinco kilómetros por debajo de la superficie, que en este caso es el fondo del océano.
Michelle Harris, estudiantes de geoquímia e integrante de la expedición, se ocupa de escribir el diario de a bordo en el blog del proyecto. Allí hay más información, fotos y datos biográficos de la tripulación.